Un reto del proyecto de salud oral explicado en primera persona por los alumnos de Higiene Bucodental
¿Qué hicimos?
En el segundo curso de Higiene bucodental nos propusieron un reto muy especial: preparar un proyecto de salud oral dirigido a los alumnos de primero de primaria, niños y niñas de 5 y 6 años, de la Escuela Tabor, situada en la Calle Cartagena 231-239, en Barcelona.
El objetivo era claro: enseñarles de manera divertida y adaptada en su edad, la importancia de cuidar los dientes y la boca para mantener una salud óptima.
Con mucha ilusión y esfuerzo, organizamos tres actividades pensadas para captar su atención y, a la vez, ayudarlos a aprender buenos hábitos.
1.Taller de clasificación de alimentos
En esta primera actividad, queríamos que los niños pudieran identificar qué alimentos son buenos para los dientes y qué pueden perjudicarlas. Lo hicimos con imágenes colorides y una cartulina dividida en dos partes, invitándolos a colocar los alimentos en dos categorías: “Alimentos Sanos” y “Alimentos Malos”. Con muchas risas y sorpresas, descubrieron que alimentos como las manzanas son amigos de los dientes, mientras que los caramelos, por ejemplo, no lo son tanto.
2. Cuéntame un cuento
Esta parte fue mágica. Explicamos un cuento protagonizado por Dentin y El Malvado Trencadents, unos personajes que ayudaron a entender por qué es tan importante lavarse los dientes cada día.
3. Taller práctico
Aquí pasamos a la acción. Cada grupo recibió una boca hecha con plastilina, con los dientes simulados con chicles. Con el cepillo de dientes que los dimos, tenían que eliminar la “placa bacteriana” que habíamos colocado. Esta actividad práctica nos sirvió para enseñarlos, paso a paso, la técnica de cepillado de Charters, con movimientos adecuados para limpiar bien todos los dientes.
Objectivos del taller
El objetivo principal de este taller era enseñar a los niños la importancia de mantener una buena higiene bucal y adquirir hábitos saludables que contribuyan especialmente a su salud dental a largo plazo. Para conseguirlo, se propusieron varias actividades prácticas y educativas que se centraron en dos aspectos fundamentales:
- Aprender a cepillarse correctamente los dientes: Se puso especial énfasis en la técnica adecuada de cepillado. Se les explicaron los pasos necesarios para eliminar la placa bacteriana de manera efectiva. Después los niños tuvieron la oportunidad de practicar con cepillos y maquetas dentales para perfeccionar sus movimientos.
- Conocer los alimentos buenos y malos para la salud bucal: Se trabajó en la identificación de los alimentos que favorecen una boca sana, como los frutas y verduras, así como aquellos que puedan ser perjudiciales, como los ricos en azúcares o ácidos. Esta actividad tenía como objetivo concienciar los niños sobre la relación entre la alimentación y las caries u otros problemas bucales.
¿Cómo recibieron las actividades propuestas los niños?
Los niños eran muy agradables y bastante participativos, así que en la hora de hacer la presentación de las actividades los gustó tanto, que costó un poco «calmar sus emociones y dinamismo».
Durante la primera actividad, que era clasificar los alimentos todos querían participar y salir a la pizarra, aunque había alguien otro niño o niña que no quería porque le daba vergüenza, pero finalmente se animaron. En la segunda actividad, que era el cuento, se ilusionaron mucho, y todos estuvieron muy atentos. Les gustó especialmente la parte en que tenían que bailar, aunque creemos que se los hizo un poco corto, pero destacamos que estaban muy contentos. Y, finalmente, la tercera actividad fue un éxito, porque todos participaron y limpiamos muy bien las maquetas de los dientes sucios y de la manera que explicamos que tenían que hacerlo.
¿Cómo nos hemos sentido nosotras (alumnas)?
Al principio, nos sentíamos un poco nerviosas, pero a medida que íbamos explicando, nos hemos ido adaptando en la clase y nos hemos sentido cada vez más cómodas. Pensábamos que los niños de 1.º serían más tranquilos y no harían tanto de «alboroto», pero nos hemos dado cuenta que eran bastante charlatanes y plenos de energía. Aun así, hemos sabido gestionar la situación con éxito. Finalmente, al acabar la clase, estábamos bastante cansadas, pero también muy contentas, puesto que la experiencia nos gustó mucho.





